Sumatriptán fue aprobado por la FDA para el tratamiento de las migrañas agudas en pacientes adultos. Las migrañas que se pueden tratar con Sumatriptán pueden ser con o sin aura. Al ser un agonista selectivo de los receptores de serotonina, Sumatriptán estimula los receptores de serotonina en el cerebro, estrechando los vasos sanguíneos del cerebro y aliviando el dolor. Al mismo tiempo, este medicamento también afecta a la forma en que las señales de dolor se transmiten entre el cerebro y las terminaciones nerviosas para un mejor alivio del dolor. Puede comprar Sumatriptan 50 mg o 100 mg en línea en forma de comprimidos, pero también hay disponible una solución intranasal y una solución inyectable. Cuando compre Sumatriptán online, tenga en cuenta que 200 mg es la dosis máxima diaria. No debe superar esa dosis para evitar síntomas desagradables. Tomar más cantidad de este medicamento no va a hacer que su tratamiento sea más eficaz. Otra cosa a tener en cuenta antes de decidirse a comprar Sumatriptán en una farmacia online es el hecho de tomar cualquier otro medicamento que pueda interactuar con él, especialmente isocarboxazida, citalopram, venlafaxina, duloxetina, sibutramina, procarbazina, paroxetina, fluoxetina, fenelzina o sertralina. Para evitar interacciones, hable con su médico o farmacéutico sobre la mejor manera de combinar ambos tratamientos. Sumatriptán no puede ser utilizado por mujeres embarazadas o en periodo de lactancia hasta que no hayan consultado todos los riesgos y beneficios de su tratamiento con un profesional cualificado. No se sabe si el Sumatriptán afectará al feto y cómo exactamente. Las madres lactantes deben evitar el Sumatriptán porque se excreta en la leche materna.

Efectos secundarios

El sumatriptán puede causar algunos efectos secundarios leves propios en el paciente que toma una determinada dosis. Sin embargo, los efectos secundarios no son muy probables en la mayoría de los pacientes. Aun así, debe tener en cuenta la posibilidad de que se produzcan efectos secundarios leves como debilidad, mareos, molestias abdominales, enrojecimiento, hormigueo, irritación nasal y sudoración. Los efectos secundarios más graves, como las convulsiones, el espasmo de las arterias coronarias y los latidos cardíacos anormales, son extremadamente raros y deben comunicarse a su médico.